Rizando el rizo. La nueva legislación OMG de la Unión Europea
La Unión Europea ha conseguido un nuevo acuerdo sobre los OMG en Europa. Otra vez los (interminables) debates sobre ciencia y seguridad, medio ambiente, derecho a saber, transparencia, etc. Nada nuevo. Nada resuelto.
No deja de ser curioso que después de esfuerzos investigadores, aprobaciones por la EFSA y otras instancias internacionales, Europa no sea capaz aun de separar “la paja del grano” y ser consecuente con sus decisiones y sus principios.
Dicho de otro modo, sobre la base de los principios del Mercado Único se adopta una decisión que permitiría a los Estados miembros tomar decisiones que no se ajustan al mismo. Es lo que un amigo llama “el Síndrome de Estocolmo de la Unión Europea, sin siquiera haber sido raptada”.
Pero hay un factor complementario que es más preocupante aún; con esta decisión se está creando un precedente ya que los Estados miembro podrían ir en contra de los principios básicos de la Unión: la ciencia, la seguridad alimentaria o la protección medioambiental pueden no ser los únicos criterios que guíen las decisiones políticas.
Y mientras tanto, Estados Unidos, China, Brasil o Argentina siguen su línea. Está claro que la víscera no ayuda a hacer planteamientos de largo plazo, pero en algún momento tendremos que replantearnos con sosiego hacia dónde vamos, y qué queremos.