La Guardia Civil detiene e investiga a 65 personas por fraude alimentario

La Guardia Civil ha detenido e investigado a 65 personas en 14 actuaciones enmarcadas en la operación internacional OPSON XI, coordinada por Interpol y Europol, que se ha centrado en pasaportes, carne de caballo, miel, productos de carne y pescado, aceite de oliva, bebidas alcohólicas y alimentos ecológicos.

En los 26 países participantes se han realizado un total de 74.000 controles, 137 personas han sido denunciadas a las autoridades judiciales, se han emitido 80 órdenes de detención y se han denunciado 2.078 infracciones.

Según ha informado este sábado la Dirección General del Instituto Armado, además, han sido detectadas y desarticuladas ocho redes criminales, con un total de 26.800 toneladas de alimentos y 15 millones de litros de bebidas alcohólicas incautados.

En esta edición de la operación, los agentes han realizado en España un total de 2.530 controles e inspecciones en centros de distribución, almacenes, superficies comerciales, medios de transporte, contenedores y depósitos fiscales, puertos y aeropuertos del país.

En la primera fase de la operación, entre diciembre de 2021 y mayo de este año, la Guardia Civil intensificó la vigilancia y las actuaciones sobre el fraude agrolimentario, con la elaboración y distribución de productos falsificados o de baja calidad.

Los agentes detectaron varios modus operandi, como la falsificación de documentos para la importación de productos deficientes o que incumplían los requisitos legales existentes, así como la falsificación de efectos timbrados o precintos de los propios envases.

Y han sido en provincias como Alicante, donde los agentes desarticularon una red internacional dedicada al comercio de naranjas procedentes de Egipto contaminadas con clorpirifos (plaguicida cuyo uso está prohibido en la UE desde 2020), y que se saldó con un total de 20 toneladas intervenidas y 13 personas investigadas.

En Sevilla desmantelaron una red dedicada a introducir grandes partidas de aceite a granel en el mercado, con "grave" riesgo para la salud pública, ya que no era apto para el consumo por no existir trazabilidad de dicho producto, por lo que fueron investigadas cinco personas.

Y desde China, un grupo criminal se dedicaba a la comercialización de azafrán, cuando en realidad era gardenia modificada molecularmente, en una actuación en la que agentes de Málaga en colaboración entre otros con Europol, detuvieron a cinco personas e investigaron a otras seis e intervino más de 10.000 kilos de la sustancia.

En Santander, el Seprona investigó a un grupo delictivo que falsificaba documentos de identificación y transporte de caballos de origen cántabro para su incorporación a la cadena alimentaria sin los requisitos legales oportunos y su posterior venta en Francia, con lo que fueron detenidas seis personas y diez fueron investigadas.