La industria y el retail piden posponer el impuesto al plástico

Los costes crecientes ponen al límite al sector agroalimentario, así como a otros sectores

Planta de reciclado de plásticos / Archivo

Las patronales defienden la reducción de impuestos y trabas administrativas siempre que pueden. Hace solo unos días, Anged pedía al Gobierno huir de "relatos conspiratorios y populistas", además de reducir el IVA, una de las medidas más rápidas y directas para reducir el precio de los productos.

En esa línea, el sector agroalimentario se ha sumado a un conjunto de industrias que lanzan una advertencia sobre una nueva figura impositiva que entrará en vigor el uno de enero. Se trata del impuesto al plástico, que rechazan Aecoc, Aces, Asedas, Fiab y Cooperativas Agroalimentarias.

A este sector se suman la industria automovilística, la química, la de la limpieza y la del plástico, según informa ElEconomista. Este rechazo ha sido expuesto ante la ministra de Hacienda a través de una carta a la que ha tenido acceso Food Retail & Service y en la que se señalan los diversos problemas que ya atraviesan las empresas españolas.

De ese modo, en sus primeras líneas aprovechan para reiterar la "preocupación por la delicada situación a la que se enfrentan los diferentes sectores", explican "y que se vería gravemente empeorada por la entrada en vigor del impuesto especial a envases de plásticos no reutilizables".

Esta misiva da continuidad a otra carta que se envió recientemente y que ya "auguraba un futuro incierto y desfavorable". "Así ha sido", concluyen las patronales. Al IPC, que alcanza el 10,5%, se suman las advertencias del Banco Central Europeo sobre un estancamiento de la economía.

Esa ralentización vendría acompañada de un contexto económico adverso, con incrementos elevados de los precios. "Ante esta compleja situación, no podemos más que insistir en que la introducción de una nueva carga fiscal (...) no resultaría beneficiosa en estos momentos, sino todo lo contrario", exponen las asociaciones empresariales.

No obstante, las empresas no solo se quejan de que se vaya a introducir este impuesto, sino de que quedan apenas tres meses para que entre en vigor y se desconoce cómo les va a afectar. "Si bien el Ministerio de Hacienda ha publicado un documento de preguntas y respuestas sobre el impuesto, siguen quedando muchos aspectos clave por resolver", critican.

Así las cosas, solicitan que se retrase la entrada en vigor del impuesto hasta el 1 de enero de 2024. Eso ayudaría a no incrementar las cargas tributarias, por un lado, y también a aclarar todas las dudas pendientes. Con ello, las patronales creen que se daría "un respiro a las empresas y ciudadanos de nuestro país".

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

También te puede interesar