337,5 millones de euros, la multa impuesta finalmente por la Comisión Europea a Mondelēz
Se trata de la novena sanción más elevada aplicada por la UE por prácticas contrarias a la competencia. Según la multinacional estadounidense, propietaria de marcas como Oreo, Cadbury y Toblerone, la decisión hace referencia a incidentes "históricos y aislados, la mayoría de los cuales cesaron o se resolvieron mucho antes de la investigación".
La multa que finalmente ha impuesto la Comisión Europea al fabricante estadounidense Mondelēz por restringir las ventas de sus productos entre los estados miembros asciende a 337,5 millones de euros, rozando la cifra de los 340 millones que la empresa propietaria de marcas como Oreo, Cadbury y Toblerone había reservado para hacer frente a la sanción, como ya informó Food Retail & Service. La multinacional admitió en su momento que era muy posible que la multa final fuera "mucho mayor"; con todo, se trata de la novena cuantía más elevada impuesta por la UE por prácticas contrarias a la competencia.
Según ha declarado la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, "descubrimos que Mondelēz impedía ilegalmente a los minoristas comprar ciertos productos (chocolate, galletas y café) en los estados miembros donde los precios eran más bajos, lo que permitió a Mondelēz mantener precios más altos. Esta situación perjudicaba a los consumidores".
La Comisión Europea ha aprovechado el momento para reiterar que la libre circulación de mercancías en el mercado único es el núcleo del proyecto europeo, subrayando que los ciudadanos de la UE "deben poder comprar productos más baratos cuando estén disponibles a un precio inferior en otro estado miembro. Deben tener libertad para hacerlo en los supermercados cuando los minoristas importen el producto más barato. Cualquier empresa que obstruya esta libertad está actuando ilegalmente y debe ser castigada en consecuencia".
Inspecciones que se remontan a 2019
Ya en 2019, la UE expresó su preocupación por el comercio transfronterizo de productos de Mondelēz y la Comisión comenzó con inspecciones sin previo aviso en las fábricas de la multinacional, que revelaron dos tipos diferentes de infracciones, desde 2006 hasta 2020, abarcando gran parte de la UE: "En primer lugar, Mondelēz celebró acuerdos anticompetitivos para restringir el comercio transfronterizo de sus productos. En segundo lugar, abusó de su posición dominante en el mercado de barras de chocolate en determinados mercados nacionales para restringir las importaciones", explicó Margrethe Vestager.
En relación al primer tipo de infracción, el gigante estadounidense celebró acuerdos separados con determinados minoristas para determinar en qué territorios se les permitía o no vender productos de Mondelēz, con el fin de "controlar dónde y a quién revendían sus productos los minoristas".
En cuanto al segundo tipo de infracción, la multinacional retiró, por ejemplo, las tabletas de chocolate Côte d'Or del mercado neerlandés para impedir que los minoristas las revendieran en Bélgica, donde Mondelēz vendía muchas más tabletas a precios más elevados. En otro caso, la compañía impidió durante cuatro años a un mayorista comprar sus chocolatinas en Alemania, donde eran más baratas, y revenderlas en otros lugares de la Unión Europea.
Consecuencias negativas en precios y consumidores
En palabras de la comisaria de Competencia, "tales abusos dividieron artificialmente el mercado interior, con consecuencias negativas para los precios y la capacidad de elección de los consumidores en la UE". No obstante, Vestager ha destacado la cooperación prestada por la multinacional durante la investigación, lo que habría reducido la multa de la empresa en un 15%.
Por su parte, Mondelēz International ha confirmado, en declaraciones a Gondola Group, que ha llegado a un acuerdo con la Comisión Europea, poniendo fin a esta investigación, y que, en todo caso, "la decisión se refiere a incidentes históricos y aislados, la mayoría de los cuales ya se habían terminado o remediado mucho antes de la investigación de la Comisión".
Según el fabricante estadounidense, "muchos de estos incidentes estaban relacionados con transacciones comerciales con intermediarios, que suelen tener lugar a través de ventas esporádicas y puntuales, y con un número limitado de distribuidores a pequeña escala que desarrollan nuevos negocios en mercados de la UE en los que Mondelēz International no está presente o no comercializa los productos en cuestión. Esto representa una parte muy limitada del negocio europeo de Mondelēz International".
Archivado en
No hay comentarios