La posición de la refrigeración española ante la prohibición de gases fluorados

Asedas, a través de un comunicado, muestra la posición conjunta de toda la cadena de valor de la refrigeración y aire acondicionado de nuestro país. El motivo es la votación en el Parlamento Europeo y las negociaciones en Trílogo del Reglamento de Gases Fluorados (FGAS), un reglamento técnico que establece restricciones al uso de estos gases y vigila su cumplimiento.

La votación final del parlamento se producirá el próximo miércoles 30 de marzo y se vota la propuesta de texto aprobada en la Comisión de Medio Ambiente, en el que se incluye la prohibición al uso de estos gases a partir de 2024 tanto en mantenimiento de refrigeración como de clima (aire acondicionado). Una propuesta que es imposible de cumplir en nuestro país, ya que, entre otras características técnicas, para aire acondicionado no hay sustitución factible a día de hoy, lo que tendría consecuencias muy negativas medioambientales, sociales y económicas.

En la sesión del día 30 se votarán varias enmiendas, entre ellas, la enmienda 152, que establece un calendario claro de eliminación progresiva con el que los supermercados (y cualquier sector que utilice sistemas de frío y aire acondicionado en sus procesos) pueda realizar una transición justa hacia refrigerantes naturales.

Además, se solicita poder realizar mantenimiento en las instalaciones de aire acondicionado, ya que el uso de refrigerantes naturales a día de hoy es muy incipiente e imposible según que instalaciones. "Desde Asedas apoyamos los objetivos de este reglamento de gases fluorados, pero siempre desde una eliminación progresiva y con calendarios factibles al estado del arte de la tecnología. Los refrigerantes con un alto potencial de calentamiento global deben ser sustituidos por alternativas sin un impacto tan negativo sobre el clima, de acuerdo con los objetivos climáticos de Europa, pero nos preocupa un umbral demasiado bajo de los gases -menos de 150 PCA- lo que supondría que no podrían mantenerse instalaciones de refrigeración relativamente nuevas a partir de 2024, lo que significa una inversión desorbitada en instalaciones que están lejos de cumplir su vida útil", afirman desde la asociación.

"Además, hemos tenido conocimiento que la propia Comisión, como varios países del Consejo, también se oponen a la postura de la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento, aunque no tenemos clara la posición de España, país muy afectado si al final prospera la posición del Parlamento. En el caso del sector de la distribución alimentaria, en caso de llevarse a cabo la prohibición de mantenimiento de sistemas de refrigeración más del 90% de los 24.000 puntos de venta de distribución alimentaria en España no podrían ser mantenidos!", continúan.

"La reconversión de todo el parque de instalaciones a sistemas sin fluorados es irrealizable en los plazos propuestos en las distintas enmiendas, ya que, en la práctica, la reconversión de un sistema basado en gases fluorados a otro que no lo está implica el desmantelamiento completo de la instalación y sustituirla por una nueva donde no se puede aprovechar ninguno de los componentes ni elementos actuales", concluyen", concluyen desde Asedas.