Autorregulación y colaboración contra el desperdicio alimentario

Un problema de todos, en el que la autorregulación es clave para gestionar el problema del desperdicio de alimentos. Carlos Cabanas, secretario general de Agricultura y Alimentación del Magrama, abrió el II Punto de Encuentro Aecoc contra el Desperdicio Alimentario haciendo un llamamiento a todos los actores del sector agroalimentario español para reducir este problema, al que también ha definido como "ético".

Para Cabanas, cada agente, empresa o entidad debe tomar responsabilidad y medidas sobre este problema económico, social y medioambiental. “El ministerio ya ha puesto en marcha políticas e iniciativas”, pero considera que la autorregulación en cada caso será la vía para gestionar este problema.

Más de 200 profesionales de empresas, administración pública, entorno académico y bancos de alimentos se han reunido en Madrid en la segunda edición del punto de encuentro de Aecoc contra el desperdicio alimentario, con el fin de analizar esta problemática y las fórmulas para ponerle fin.

Datos de la Comisión Europea muestran que en nuestro continente se tiran cada año 89 millones de toneladas de alimentos. Según Aecoc, el 2,4% del total de productos no llegan a ser comercializados por diversas razones. De ese 2,4%, el 26% son alimentos aptos para el consumo que no son donados para este fin, por lo que desde la asociación se trabaja para impulsar iniciativas que permitan incrementar el porcentaje de productos redistribuidos a bancos de alimentos u otras entidades benéficas.

Además, Aecoc está trabajando en estrecha colaboración con las empresas en el impulso de dos proyectos piloto para dotar de equipamientos de frío a los bancos de alimentos de Castilla y León y Málaga, así como a otras entidades beneficiarias; y en el desarrollo de unas recomendaciones sobre cómo los envases y embalajes puedan ayudar a reducir el desperdicio alimentario.