SOS del Gran Consumo: "La cadena está más tensionada que durante la pandemia"

De industria primaria a fabricantes y distribuidores coinciden: el Gobierno debe actuar inmediatamente y los manifestantes deben parar. Sólo en los supermercados, la huelga cuesta 130 millones al día.

Lineal de leche vacío en Mercadona / Archivo
Juan Carlos Téllez

23 de marzo 2022 - 10:58

"La situación es insostenible". Así de tajantes se han mostrado los representantes de la cadena de valor del gran consumo en una convocatoria de urgencia en la que han pedido al Gobierno que actué "con urgencia e inmediatez" ante el paro del transporte que cumple ya 10 días en una espiral creciente de problemas de abastecimiento y de escasez de productos.

Fiab, Anged, Aces, Cooperativas Agroalimentarias, Aecoc, Asedas y Hostelería de España, todos señalan comprender la situación de los transportistas, pero les piden levantar el pie en unas protestas en las que, señalan, "hay camioneros que quieren trabajar pero han tenido que parar por las amenazas". En cuanto al Gobierno, algunas de las voces del sector, como la de José María Bonmatí (Aecoc), no entienden la lentitud a la hora de tomar decisiones: "No entendemos que una de nuestras peticiones, que ha sido solicitar que se tomen medidas inmediatamente, se zanje con una reunión convocada para el próximo viernes", ejemplifica, recordando que hay empresas que ya han anunciado la paralización de sus actividades porque no aguantan ni 24 horas más.

"No se están negociando soluciones para este problema", añaden desde Anged; mientras que desde otras organizaciones, como Asedas, recuerdan que el sector está perdiendo 130 millones de euros al día.

RIESGO DE DESABASTECIMIENTO Y RESPONSABILIDAD DEL CONSUMIDOR

Más allá de buscar el fin de la huelga, la cadena de valor del gran consumo se muestra preocupada por los problemas de abastecimiento vividos durante la última semana. "Va a haber suministro", señalan, pero coinciden en remarcar que ya son muchas las industrias que se ven afectadas por los problemas en el transporte de materias primas, envases, etc. Dos ejemplos claros son el sector lácteo o ganadero, con pérdidas millonarias acumuladas durante estos diez días y con la sombra de nuevos ERTE planeando sobre el sector.

Desde el gran consumo se apela también a la responsabilidad del consumidor. Aurelio del Pino, de Aces, recuerda que el usuario final también tiene su parte de responsabilidad en esas imágenes de desabastecimiento que hemos vivido en los últimos días. Mantener la calma, señalan desde la cadena del gran consumo, es necesario ante un sector que ya ha demostrado responder con creces en crisis anteriores y que se ha erigido como esencial especialmente durante los últimos dos años en crisis como la del coronavirus o el temporal Filomena.

En perspectiva, eso sí, el mensaje no es muy esperanzador: "La cadena alimentaria está más tensionada que durante la pandemia", sentencian preocupados. Durante estos días el consumidor ya ha podido observar de primera mano cómo ha comenzando a producirse escasez en determinados productos como leche, harinas o aceite. Bien por falta de suministro o bien por acopio, lo cierto es que la situación es preocupante y el gran consumo no lo oculta.

PÉRDIDAS MILLONARIAS

El pasado viernes, cuando apenas habían transcurrido cinco días desde el inicio de la huelga, las asociaciones que conforman la cadena de valor señalaban que las pérdidas ya alcanzaban los 600 millones de euros, ponen en peligro más de 100.000 puestos de trabajo y están perjudicando especialmente a sectores igualmente afectados por el actual escenario inflacionista. Sumemos a esto -solo en la distribución- unos 130 millones más de pérdidas cada día. Una situación catastrófica.

MEDIDAS URGENTES

Las asociaciones del gran consumo son claras: piden al Gobierno rapidez y contundencia y a los huelguistas que desconvoquen el paro. Sin embargo, las escasas reuniones que se están llevando a cabo no parecen ir por este camino.

De hecho, desde la cadena de valor del gran consumo señala la paradoja que se está dando en todo este conflicto: "Ni los que estamos pagando la factura ni los convocantes están sentados en la mesa de las negociaciones". Toda una muestra de cómo se está llevando toda esta situación desde las administraciones públicas. De momento, no se esperan nuevas reuniones hasta el próximo jueves (estaban previstas para el viernes pero el ministerio de Transportes ha anunciado el adelanto de la reunión un día coincidiendo con la convocatoria de urgencia del gran consumo. ¿A quién beneficia alargar esta agonía?

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