Ocho claves que definen a los consumidores en este 2016
Los compradores tienen ahora un marcado carácter ahorrador. También están preocupados por la salud y son exigentes.
¿Qué claves definen al consumidor actual? La respuesta nos la ofrece la Encuesta sobre hábitos de consumo 2016, que atribuye al comprador de hoy un espíritu “crítico y exigente” y un carácter “ahorrador y preocupado por su salud, el desperdicio de alimentos y la sostenibilidad de la cadena agroalimentaria”.
En resumen, este análisis, llevado a cabo por las asociaciones de consumidores Ceaccu, Fuci, Cecu, Unae y Uca/Cauce, junto a Mercadona, indica que el consumidor de 2016 escoge el formato supermercado como lugar para realizar su compra de cada día y da prioridad a los productos frescos y de gran calidad.
Pero veamos en detalle esta encuesta que analiza los hábitos de consumo y los factores que influyen en la compra, además de la formación que tiene el consumidor en temas de nutrición y etiquetado o sus conocimientos respecto al consumo responsable. Estos son los ocho aspectos más destacados:
1.- Hábitos de compra y consumo: el 65% de los consumidores elige el supermercado como su lugar de compra habitual (seguido del hipermercado y de tiendas especializadas) y la compra de productos frescos se impone al resto. Los datos reflejan que los hábitos alimentarios de los ciudadanos son menos saludables de lo recomendable y que tienen un bajo conocimiento sobre alimentos libres de alérgenos, ecológicos o transgénicos.
2.- Factores que influyen en la compra: lo que más valora el consumidor a la hora de seleccionar un producto es la calidad, seguida del precio. Respecto al lugar de compra valora la proximidad del establecimiento.
3.- Compra por Internet: gana seguidores y mejora su percepción (un 57% la valora positivamente), aunque solo el 2% dice utilizarla, principalmente porque el consumidor sigue prefiriendo ver el producto antes de comprarlo.
4.- Información sobre el producto: el 71% dice buscar información sobre un producto antes de comprarlo y encontrarla, principalmente, en la propia etiqueta, aunque a muchos no les queda clara la diferencia entre la fecha de caducidad y la de consumo preferente.
5.- Hábitos de alimentación: el 77% de los consumidores considera que sus hábitos son saludables y que la información nutricional presente en el etiquetado es buena.
6.- Desperdicio de alimentos: el 94% de los encuestados considera que es un problema grave y el 87% afirma estar haciendo algo para evitarlo. El 67% cree que la responsabilidad del desperdicio es de "todos los eslabones de la cadena agroalimentaria” y, especialmente, de los propios consumidores (13%).
7.- Formación del consumidor: preguntados por diferentes términos relacionados con la sostenibilidad de la cadena agroalimentaria, los consumidores conocen qué son los transgénicos, pero más de la mitad de la población desconoce el concepto de huella ecológica, solo un 25% conoce el término de alimentos irradiados y únicamente una quinta parte ha oído hablar de soberanía alimentaria.
8.- Solidaridad: la mitad de los encuestados cree que en el mundo se producen alimentos suficientes para satisfacer las necesidades de sus habitantes y su opción preferida (53%) sería un reparto más solidario de los alimentos.
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