Finestrelles Shopping Centre abre sus puertas
Ubicado en Esplugues de Llobregat, el centro comercial prevé atraer a 8,5 millones de visitantes al año de Barcelona y alrededores.
El Finestrelles Shopping Centre abre, por fin, este miércoles sus puertas al público tras un retraso debido a las malas condiciones climatológicas. Este espacio reúne una oferta comercial de 103 locales que ocupan una superficie de 39.250 m2. Ubicado en Esplugues de Llobregat, el centro comercial prevé atraer a más de ocho millones y medio de visitantes anuales de Barcelona y las poblaciones de la comarca del Baix Llobregat.
Un hipermercado Alcampo, un gimnasio de la cadena Duet Fit, MediaMarkt y una tienda Decathlon son los grandes establecimientos de este nuevo espacio, donde también están presentes varias marcas del grupo Inditex, como Zara, Bershka, Pull & Bear o Oysho. Otras firmas de moda que abren en el centro comercial son H&M, Mango, Kiabi, y New Yorker entre otras.
La oferta al público se completa con una gran variedad de restaurantes, entre los que están presentes cadenas de restauración como McDonald’s, La Tagliatella, KFC, Blue Frog, Dunkin Coffee y Starbucks. El centro comercial generará 1.150 empleos directos, principalmente, en la comarca del Baix Llobregat.
"Hemos trabajado mucho para conseguir una oferta comercial y de restauración lo suficientemente variada y atractiva para que los diferentes consumidores puedan sentirse a gusto", asegura Víctor M. Gómez, consejero delegado en España de Equilis, el grupo promotor belga que ha invertido 120 millones de euros en la construcción del complejo.
UNA UBICACIÓN "PRIVILEGIADA"
Según sus responsables, Finestrelles Shopping Centre se encuentra en una "localización privilegiada", entre una de las principales entradas a Barcelona y las poblaciones de la comarca del Baix Llobregat. En un radio de 20 minutos se encuentran 21 municipios, con una demanda potencial que supera los 2,5 millones de personas.
El diseño arquitectónico del centro comercial ha unido una visión de modernidad con luminosos espacios abiertos. El equipo técnico liderado por el arquitecto Íñigo Arnaiz ha concebido el espacio como una prolongación del espacio público en el ámbito privado, similar a la creación de una ciudad dentro de un edificio.
La construcción tuvo que salvar las diferencias de altura del terreno, superiores a los 14 metros, que acabaron convirtiéndose en una buena oportunidad, porque representaron un aumento de la movilidad interna, con tres niveles distintos de planta con salida exterior a la calle. Las obras empezaron a finales de 2016 y han culminado casi dos años después.
El centro comercial cuenta con la escultura singular de Carlos Albert, Vuelo 2018, que representa la esencia del proyecto como un "símbolo de superación y encuentro entre sus visitantes y todos aquellos que han contribuido a su realidad".
SIN BARRERAS
Finestrelles Shopping Centre tendrá un ahorro en energía que será muy superior al de otros centros comerciales al estar construido con materiales que presentan el máximo nivel de sostenibilidad y gestionará residuos y bajas emisiones de CO2 por debajo de los estándares habituales. Además, está diseñado sin barreras arquitectónicas.
El proyecto opta a la certificación Breeam (Building Research Establishment’s Enrironmental), tanto a nivel de edificio como de gestión de la construcción del mismo. Este método, establecido por el Reino Unido, analiza múltiples áreas relacionadas con la construcción de un edificio con el objetivo de evaluar el grado de sostenibilidad ecológica (energía, materiales utilizados, gestión de residuos, contaminación, uso de agua, etc). Las obras ya han recibido el certificado Breeam 'Very Good' en la fase de construcción.
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