¿Cómo prepara el primer autoservicio de Francia casi 1.000 pedidos al día con esperas máximas de 30 minutos?

La primera particularidad de Chronodrive, como relata Olivier Dauvers, es que, en el momento en que el cliente llega con su vehículo al establecimiento, tiene que registrarse, pasando por un terminal que le mostrará la plaza concreta en la que puede aparcar y esperar su pedido por un tiempo no superior a los 30 minutos, según el compromiso que la cadena mantiene con sus clientes.

Hoy en día, este almacén de 2.000 m2 cuenta con entre 12.000 y 13.000 artículos perfectamente referenciados con una numeración compuesta por el número del pasillo, el del nivel del estante y el lugar concreto de cada producto, de manera que el empleado encargado de preparar el pedido “va ‘navegando’ por los pasillos buscando una referencia numérica y no un producto”. Ello explica que en Chronodrive puedan verse cerca, en el mismo lineal, productos que nunca lo estarían en un supermercado tradicional, pero que aquí sí lo están "por compartir un semejante nivel de rotación", según explica Dauvers.

A través de cintas transportadoras, las cajas con los artículos solicitados finalizan su recorrido en la planta inferior del almacén, donde quedan a la espera de realizar su entrega al cliente o de completarse, si fuera el caso, con productos frescos o congelados, una parte del pedido que se prepara en el último momento con el fin de no romper la cadena de frío.

Una vez que el pedido está completamente finalizado, con una media habitual de unos 30 artículos por cesta y un importe que ronda entre 80 y 90 euros, el empleado acude al parking a recibir al cliente para que éste pueda cargarlo en su vehículo.

Hasta 1.752 pedidos en un solo día

El establecimiento de Chronodrive visitado por Olivier Dauvers prepara con este sistema una media de 1.000 pedidos al día. El pico máximo se alcanzó, según afirma el periodista, en marzo de 2021, al final del periodo Covid, con 1.752 pedidos en un solo día. La facturación máxima también se alcanzó en este periodo, con 23 millones en un solo año.

Desde el pasado mes de marzo, la última innovación de Chronodrive es la entrega a domicilio por medio de vehículos eléctricos que hacen una media de 120 repartos a la semana con cestas por un valor que superan los 150 euros cada una.