Mere comienza a abandonar España en febrero

La cadena de supermercados Mere, el retailer ruso especialista en hard discount, abandonará su actividad en España desde el próximo 15 de febrero, fecha en la que cerrará algunos de sus supermercados, según han confirmado a Food Retail & Service los trabajadores de una de sus tiendas en la Comunidad de Madrid, que señalan que la cadena les ha comunicado que ese será su último día de trabajo en la tienda.

La compañía, que llegó a nuestro país hace menos de un año con la etiqueta de 'el Lidl ruso' (por su política de precios y su imagen espartana, al estilo de los primeros pasos en España de la cadena alemana), aterrizó con la idea de hacerse un hueco vía precio en la guerra de los supermercados. Lo hizo comenzando su operativa en Cataluña y abriendo supermercados en los municipios valencianos de Gandía, Aldaia y la Pobla del Vallbona; en la localidad madrileña de Parla o en León.

Hace apenas unas semanas, la cadena de supermercados anunció que avanzaba en su expansión por Europa, donde la enseña preveía estrenar 50 supermercados en los próximos meses. Sin embargo, parece que al menos España no entra en estos planes. La compañía emplea actualmente a 50 personas en nuestro país. Unos puestos de trabajo que ahora quedan en el aire con el cierre, en principio, de algunas tiendas.

EL REGRESO AL ECONOMATO NO HA FUNCIONADO. LAS CONDICIONES DE MERE, TAMPOCO

Mere se fundó en 2009 y cuenta con mas de 800 establecimientos en Rusia. En el año 2015 comenzó su expansión internacional por Asia y la Unión Europea hasta llegar a nuestro país.

El modelo de Mere se basa, principalmente, en los precios bajos, entre el 20 o el 30% más baratos que la competencia y hasta el 50% para las 'primeras marcas'. El mensaje de Mere a sus proveedores es el siguiente: "El precio del producto , incluyendo todos sus costes de transportación hasta el supermercado, tiene que estar el 20-30% por debajo del mismo en el mostrador de la competencia. Esto en parte se puede conseguir ahorrando en el packaging y su tamaño – no necesitamos envolturas brillantes y muy atractivas".

Demasiado presuntuoso para un mercado tan consolidado y competitivo como el español.