El consumo sufre su mayor caída desde el confinamiento

No se han hecho esperar las consecuencias de la guerra de Ucrania y una inflación desbocada, particularmente en el mes de marzo. Según los datos que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publica este viernes, el gasto en consumo final se redujo un 2,3% en este primer trimestre en comparación con el anterior.

Así, tras una senda de crecimiento constante (4,7% acumulado en los últimos tres trimestres), los hogares son quienes más se resienten por la subida de precios. De hecho, los hogares son el único componente que reduce su gasto en consumo final en este trimestre, en concreto un 3,7%. Esta cifra representa el mayor retroceso trimestral desde el confinamiento.

No obstante, es cierto que los datos actuales mejoran si se comparan con las del año pasado a estas alturas. Es decir, el gasto en consumo final de los hogares aumentó en el primer trimestre un 3,1% en comparación con el mismo periodo de 2021.

Por otra parte, cabe destacar otros sectores que se encuentran ante una evolución dispar. Por ejemplo, el sector primario, que engloba agricultura, ganadería y pesca, ve empeorar su producción un 2,2% con respecto a finales de 2021, si bien es cierto que está sujeto a una elevada estacionalidad. Por su parte, el segmento que engloba comercio, transporte y hostelería avanzó tímidamente, un 0,4% en este comienzo de año.

FRENO ECONÓMICO

A nivel general, la economía española desaceleró su crecimiento trimestral casi dos puntos entre enero y marzo, hasta situarlo en el 0,3%, frente al 2,2% del trimestre anterior, debido a la caída del consumo. El crecimiento trimestral del PIB, el cuarto consecutivo, se ha situado seis décimas por debajo del previsto por el Banco de España y la AIReF, que habían proyectado un avance del 0,9% para el primer trimestre.

Según el avance de datos del INE, pese a la moderación trimestral del PIB, el crecimiento interanual de la economía española se aceleró casi un punto en el primer trimestre, desde el 5,5% del último trimestre de 2021 al 6,4%, como consecuencia de una mayor aportación del sector exterior.

En concreto, la demanda externa aportó 3,1 puntos al PIB interanual del primer trimestre, cifra 1,3 puntos superior a la del trimestre anterior y la más elevada desde el segundo trimestre de 2009, mientras que la demanda nacional contribuyó con 3,3 puntos, cinco décimas menos.

Por sectores económicos, los servicios lideraron el crecimiento interanual, con un aumento de su valor añadido bruto del 8,3%, seguidos por la industria, con un alza del 1,3%, y de la construcción (+1,1%). En cambio, la agricultura registró un descensos del 1,3%.