¿Prohibido entrar al súper sin estar vacunado?
Las restricciones a la movilidad en países como Chile le han jugado una mala pasada a una anciana centenaria en un supermercado Líder, propiedad de Walmart. Veremos si el 'pasaporte Covid', del que tanto se habla, llega a España en un futuro y si será necesario para hacer la compra.
Mucho se habla estos días del denominado 'pasaporte Covid', una herramienta con la que, en teoría, se simplificaría el acceso a determinados lugares y ayudaría a garantizar la seguridad de los ciudadanos. Precisamente, la UE está debatiendo una propuesta de estas características para facilitar los viajes entre los Estados miembros durante la pandemia, aunque aún presenta dudas respecto a su funcionalidad y utilidad.
Los supermercados son, precisamente, espacios a los que acude diariamente un intenso flujo de personas y, por lo tanto, podría estar justificado el uso de este certificado. Pero también puede ser una fuente de problemas.
Conflicto como el que ha vivido una anciana centenaria en un supermercado Líder de Chile, cadena propiedad del gigante Walmart, que ha sido protagonista de un incidente a cuenta de los permisos de desplazamiento en pandemia.
Isolina Grandón (así se llama la anciana) se desplazó, a sus 100 años, hasta el citado establecimiento para comprar una pechuga de pollo. Sin embargo, los guardias de seguridad del centro le denegaron la entrada por no portar su permiso de desplazamiento. Desgraciadamente, tampoco le ofrecieron una ayuda para solucionar esta cuestión hasta que otra clienta del supermercado, viendo lo ocurrido y ante la imposibilidad de Isolina para entrar a la tienda, decidió comprarle la pechuga de pollo.
Sin duda un exceso de protocolo que echa por tierra el básico sentido común y que finalmente se solucionó gracias a la solidaridad de otros clientes del establecimiento.
"Tendrían que ser un poquito más amables", manifestó Isolina a un medio local tras lo sucedido, como podéis ver en este vídeo que recoge Oye Siri Noticias.
La propia cadena Walmart se ha pronunciado respecto a este acontecimiento, que ciertamente escandalizó a quienes fueron testigos de lo sucedido. La enseña lamentó lo ocurrido y reconoció que la anciana "pudo pasar algunos inconvenientes". Sin embargo, precisó que su prioridad es la salud de sus clientes y empleados. "Hacer excepciones en la actual situación puede tener graves consecuencias para la salud de las personas", aseguró.
TRABAJADORES ESENCIALES
Se trata, sin duda, de un suceso, relacionado con la movilidad, pero que bien podría 'exportarse' en un futuro a otros países, como España, si se aprueba definitivamente el 'pasaporte Covid'. ¿Qué sucedería en este caso con las personas que no estén vacunadas? El tiempo nos lo aclarará. En todo caso, esta iniciativa parece un poco lejana aún si tenemos en cuenta el lento ritmo de vacunación que existe actualmente en nuestro país y el hecho de que ni siquiera están siendo vacunados prioritariamente los trabajadores de este sector.
De hecho, así lo han pedido las organizaciones Aces, Aecoc, Anged, Asedas, Cooperativas Agro-Alimentarias y Fiab, reivindicando su "carácter esencial" en el plan de vacunación nacional.
Desde el inicio de la pandemia, recuerdan sus integrantes, la cadena de valor del gran consumo fue declarada como sector esencial, dada la necesidad de abastecer de alimentos y productos de primera necesidad al conjunto de la población del país. Por ello, consideran que es "imprescindible" que sus profesionales "tengan un acceso prioritario al plan de vacunación, ahora que el suministro masivo de vacunas parece estar garantizado", señalan.
En un contexto de escasez de vacunas, el sector se ha mantenido pacientemente a la espera, dado que era lógico que se priorizase a otros colectivos en función de criterios de riesgo o de edad. Pero, tras el anuncio de que nuestro país recibirá 38 millones de vacunas durante este trimestre, las organizaciones creen que ha llegado el momento de proteger a los alrededor de 2,3 millones de personas que trabajan en la cadena de valor (sector primario, industria y distribución) del gran consumo.
Defiende, por lo tanto, una "postura coherente" con lo declarado desde el inicio de la crisis sanitaria y también de garantizar el pleno funcionamiento de servicios esenciales en los que el teletrabajo -que se puede aplicar en otros sectores- no es posible, puesto que, en la mayoría de los casos, exigen presencia física para ser desarrollados.
Recordemos, además, que el sector puso al servicio de las administraciones los recursos humanos y técnicos de sus compañías para tratar de contribuir a que el proceso de vacunación pueda llevarse a cabo en nuestro país de la forma más eficaz y ágil posible, con las garantías de seguridad clínica necesarias y con el objetivo de contribuir a la descongestión del sistema público de salud.