Los mayores piden a los súper que les faciliten la lectura de los precios
Carlos San Juan –impulsor del movimiento 'Soy mayor, pero no idiota'– se suma a la petición de letras y números de mayor tamaño en los precios de los productos de estos establecimientos para que sean bien visibles por las personas mayores.
Adaptar los supermercados a los colectivos con necesidades especiales es una acción cada vez más presente en las remodelaciones y nuevas aperturas de estos establecimientos.
Precisamente, al hilo de esta cuestión, Carlos San Juan –impulsor del movimiento 'Soy mayor, pero no idiota'–, se ha adherido a una petición para que las personas mayores con dificultades visuales tengan un apoyo en estas tiendas.
En concreto, en una reseña que recoge el portal 65yMás.com, Carlos San Juan expone: "Quiero expresar mi adhesión a una carta abierta en la que a través de internet me piden que apoye a muchos mayores con dificultades visuales, que solicitan a mi juicio muy justificadamente, que los supermercados de alimentación etiqueten los detalles y el precio de sus productos con letras y números de mayor tamaño. Tamaño que nos permita a todos los clientes leerlos adecuadamente".
EL PASO EL FRENTE DE ALGUNAS ENSEÑAS
Como decimos, algunas enseñas llevan ya un tiempo implicadas en mejorar la experiencia de compra de personas con discapacidad o con problemas específicos. Cabe recordar, como os informamos en su momento, el paso que dio BM supermercadosen 2015, con la inauguración, entonces, del primer supermercado de Euskadi adaptado a personas ciegas o con deficiencias visuales. El establecimiento, situado en la calle Licenciado Poza de Bilbao, integra nuevos elementos y soportes visualmente accesibles que facilitan la compra a los clientes.
Entre las ventajas de esta iniciativa figuraban los rótulos y señalización de las áreas de la tienda ampliados con tipografías de gran tamaño, utilizando una coloración de marcado contraste figura-fondo que permite una mejor lectura por parte del usuario.
Por su parte, en 2017, Consum implantaba criterios de usabilidad y accesibilidad digital en sus portales online a través de una herramienta que ofrece a los usuarios con capacidades diferentes, tanto visuales como motrices, la posibilidad de navegar por sus webs corporativas de forma sencilla y adaptada a sus necesidades. Además, indicaba la enseña entonces, "beneficia también a personas de edad avanzada que han visto mermadas sus habilidades y a personas con capacidades digitales limitadas".
Más recientemente, en marzo de 2022, esta enseña estrenó su servicio de Compra Asistida para personas mayores y con algún tipo de discapacidad en todas sus tiendas de Castilla-La Mancha. Se trata de un programa de comercio inclusivo, que prima la accesibilidad e igualdad.
Otro ejemplo de este tipo de iniciativas lo encontramos en la cooperativa vasca Eroski, cuya nueva tienda online Eroski Azoka, que ofrece a pequeños productores del País Vasco la posibilidad de comercializar sus productos, acaba de obtener la certificación de accesibilidad AA lo que avala que cumple con los estándares internacionales de accesibilidad web para personas con discapacidad.
La web cuenta con letras de tamaños, colores y contrastes adecuados. Las imágenes y botones están correctamente etiquetados para productos de apoyo como lectores de pantalla. Igualmente cumplen los parámetros de accesibilidad elementos como la factura enviada al cliente o los correos electrónicos de gestión de pedidos.
Por su parte, El Corte Inglés ponía en marcha en 2021 una línea telefónica de atención preferente a clientes con discapacidad. Esta línea, con el número 900 293 611, es gratuita y funciona de lunes a domingo de 9:00 a 22:00 horas.
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