Coca-Cola echa marcha atrás y rebaja sus compromisos medioambientales en materia de embalajes

Coca-Cola ha rebajado algunos de sus objetivos medioambientales relacionados con el uso de materiales reciclados en sus envases. En concreto, si el gigante estadounidense se había fijado la utilización del 50% de materiales reciclados en los envases de sus productos para 2030, ahora estos objetivos se han reducido a emplear entre el 35% y el 40% en 2035.

Asimismo, la empresa había establecido anteriormente el compromiso de recoger y reciclar una botella o lata por cada una vendida antes de finales de la década, y en la actualidad garantiza la recogida del "70% al 75% del equivalente de botellas y latas introducidas en el mercado anualmente", informa Financial Times.

Según un informe del propio fabricante, su red generó 5,97 millones de toneladas de envases en 2023, una suma que incluía 137.000 millones de botellas de plástico y 74.000 millones de botellas y latas de aluminio y acero.

En todo caso, la compañía se ha defendido y asegura que sigue "comprometida con la construcción de resiliencia empresarial a largo plazo". "Estos desafíos son complejos y requieren que impulsemos una asignación de recursos más eficaz y eficiente y trabajemos en colaboración con nuestros socios para generar un impacto positivo duradero", ha subrayado Bea Pérez, vicepresidenta ejecutiva y directora global de comunicaciones, sostenibilidad y asociaciones estratégicas de The Coca-Cola Company.

CONDENA DE LOS ECOLOGISTAS

Esta marcha atrás en materia de sostenibilidad ha provocado la inmediata condena de las organizaciones ecologistas. "Estamos muy decepcionados", ha afirmado Kelly McBee, responsable de economía circular de As You Sow, organización sin ánimo de lucro de California que aplaudió el compromiso anterior de Coca-Cola en materia de envases. "Ahora, ver que se retira por completo de la mesa, es bastante devastador", ha añadido.

Por su parte, Matt Littlejohn, vicepresidente senior de iniciativas estratégicas en la organización de conservación de los océanos Oceana, ha calificado los nuevos objetivos de la multinacional en materia de envases de "miope, irresponsable y merecedora de una condena generalizada por parte de sus clientes, sus empleados, sus inversores y los gobiernos preocupados por el impacto de los plásticos en nuestros océanos y nuestra salud". "Los nuevos y débiles compromisos de la empresa en materia de reciclaje no tendrán ningún impacto en el uso general de plástico", ha asegurado.

Las empresas de bebidas se enfrentan a numerosos litigios por su producción de plástico. El pasado mes de octubre, el condado de Los Ángeles demandó a Coca-Cola y Pepsi por afirmar supuestamente que los envases de plástico "son reciclables", pese a saber que los plásticos no pueden eliminarse fácilmente sin los impactos ambientales asociados.

En otro orden de cosas, Coca-Cola también ha reculado en su objetivo de abastecerse de todos los ingredientes agrícolas prioritarios de acuerdo con sus Principios para una Agricultura Sostenible, que abarcan cuestiones como los derechos laborales y la conservación de los bosques. La multinacional ha afirmado que seguirá tratando de "apoyar el abastecimiento sostenible".