La alimentación, pilar del envejecimiento saludable

La llegada del Año Nuevo nos invita a plantearnos retos para los próximos 365 días. La proximidad del verano es sinónimo de analizar si nuestra dieta es la más adecuada para estar y vernos mejor. Pero ¿qué pasa cuando no hay ningún hito que remueva nuestro pensamiento en favor de los hábitos saludables? Lo cierto es que la preocupación por nuestra salud no debería ser solo cosa de un día concreto o de una época determinada, sino algo que ha de estar presente siempre en nuestra consciencia.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha anunciado que esta es la década del envejecimiento saludable. De hecho, hay más de 1.000 millones de personas de 60 años o más y, en 2050, más de 1 de cada 5 personas tendrá más de 60 años.

Con esta idea en mente, nos hacemos eco de algunas reflexiones de Anke Sentko, Vice President of Regulatory Affairs & Nutrition Communication de Beneo y de Beneo-Institute, que abundan en la importancia de mantener en todo momento una alimentación adecuada que beneficie nuestra salud.

Sentko recuerda que los consumidores mayores de 55 años adoptan cada vez más un enfoque a largo plazo para el mantenimiento de su salud y se quieren mantener en forma, activos e independientes el mayor tiempo posible. "La nutrición desempeña un papel fundamental en este sentido. Según los resultados de un reciente estudio, el 67% de los consumidores europeos de entre 65 y 75 años están dando pasos para que su alimentación sea más saludable", apunta.

Esta experta incide en la relevancia de controlar los niveles de glucosa en sangre de una persona mediante la nutrición como la mejor forma de ayudar a promover la salud a largo plazo. "Esto no solo favorece la salud metabólica, sino que beneficia la oxidación de las grasas para la producción de energía e inhibe el almacenamiento de grasa, lo que puede favorecer el control del peso", subraya.

En este sentido, incide en que la posibilidad de desarrollar enfermedades no transmisibles (ENT), como la diabetes y el sobrepeso u obesidad, aumenta con la edad, ya que disminuye la capacidad del organismo para corregir los errores de la dieta.

GESTIÓN DE LA GLUCEMIA

En su opinión, la clave para promover un envejecimiento saludable a través de la gestión de la glucemia es la elección correcta de carbohidratos de bajo índice glucémico, que proporcionan la energía necesaria para el metabolismo de una persona y desencadenan un aumento bajo y equilibrado de la glucosa en sangre y un bajo incremento de la insulina, además de favorecer la quema de grasas.

Con la idea de "mantenerse en forma durante más tiempo", los consumidores esperan que los productores de alimentos y bebidas les ofrezcan productos viables y más saludables. Y, lo que es más importante, "muchos están dispuestos a pagar un extra por la salud funcional a través de la dieta", sostiene. Actualmente, el 78% de las personas entre 65 y 75 años en Europa prestan atención a su consumo de azúcar.

UN ETIQUETADO CORRECTO

La elección del mensaje correcto en el envase también es clave. De hecho, la frase "un impacto menor y más ligero en los niveles de azúcar en sangre" es la preferida por el 55% de los europeos de entre 65 y 74 años.

"Además, dos tercios de los consumidores entre 55 y 64 años están dispuestos a probar nuevos productos e ingredientes cuando hay un beneficio para la salud asociado. Esto demuestra el potencial de desarrollo de nuevos productos de bajo índice glucémico que implica la información adecuada en el envase", concluye.