Exclusiva: KFC cuenta el secreto de la elaboración de su icónico pollo frito
Food Retail & Service se cuela en la cocina de la marca que, por primera vez, explica el proceso de elaboración de su plato estrella.
La cadena de restauración Kentucky Fried Chicken (KFC) no para de crecer en España, donde aterrizó en los años 70. Desde entonces, la firma fundada por el Coronel Sanders a comienzos del pasado siglo sigue su estela ascendente y no para de abrir nuevos establecimientos.
Food Retail & Service ha entrado en las cocinas del 'rey del pollo frito' donde, por primera vez, y de la mano de una de sus empleadas, conocemos el proceso de elaboración del plato estrella de la marca, una receta original de su creador que sigue siendo el "buque insignia de la marca", relata.
Según explica, la receta original tiene un marinado en crudo, nada menos que con 11 especias diferentes que son las que hacen característica a la receta.
A continuación viene el proceso de rebozado, cuando entra en cocina y empieza la manipulación. Se trata de un procedimiento determinado de rebozado entre agua y harina.
Para ejecutarlo convenientemente hay que realizar una serie de movimientos (que son específicos y que van a hacer que se distribuya la harina de manera determinada) así como la acomodación de las piezas de pollo para que luego, una vez que entren al proceso de cocinado en las freidoras, quede ese rebozado y ese aspecto que hace tan característico el producto final.
El cocinado del pollo es una de las cosas peculiares de la receta original ya que se fríe en unas freidoras que trabajan con una presión determinada. Ese procedimiento es el que hace que el acabado final del pollo de KFC sea el característico y el específico de la receta ideada por el Coronel Sanders.
RECETA DEL POLLO CRUJIENTE
La enseña ofrece también la receta crujiente, que incorporó a su menú hace ya muchos años con la que ofrece a sus clientes una alternativa a la receta original.
Este proceso se caracteriza porque el marinado del pollo es diferente, también en crudo, y luego, cuando entra en cocina, lleva un doble empanado. Este pollo se prepara en unas freidoras que trabajan de manera diferente a las de la receta original. Van sin presión y son freidoras abiertas. Ello hace que se formen esos flecos o esos copos sobre la superficie del pollo y del rebozado que lo hace tan diferente y a la vez tan especial.
Una vez el producto está cocinado, pasa de la parte de freidoras al retenedor de calor, donde dependiendo de la pieza de pollo, tendrá un tiempo de retención máximo.
Finalmente, los productos pasan a servirse en los icónicos cubos de la marca, así como también a la mesa de producción de hamburguesas.
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