Todas las personas exitosas que he conocido a lo largo de mi vida profesional reúnen estas características: pasión, trabajo, enfoque, empuje, ideas, mejora, vocación de servicio y persistencia. No es fácil reunir todas estas cualidades. Por eso el éxito está circunscrito a aquellos que las cumplen:

Pasión por lo que haces, porque no olvides que la pasión es la energía de la vida, que todo lo que hagas con pasión te hará sentir pleno y feliz.

Trabajo constante, porque la pasión y el amor por lo que se hace no sirven sin el trabajo duro, la dedicación y la constancia.

Enfoque, porque como escuché a un directivo, el enfoque es la diferencia entre ir al trabajo e ir a trabajar.

Empuje, porque así la empresa concentra todos sus recursos en los canales de distribución con el fin hacerlo llegar y convencer a los consumidores.

Ideas, porque sin creatividad la empresa moderna no puede sobrevivir. Es necesario tener la capacidad de crear cada día algo nuevo, aunque se limite a recombinar elementos en forma diferentes.

Mejorar, porque se puede lograr de muchas maneras: siendo más competitivos, aumentando la satisfacción de los clientes, optimizando los procesos de trabajo, buscando la innovación y el desarrollo de nuevos productos, optimizando los costes, internacionalizando o expandiendo nuestro negocio. Hay mil maneras de mejorar.

Vocación de servicio, porque cuando tenemos el convencimiento y la pasión por ejercer una actividad profesional tenemos una inclinación profesional orientada a satisfacer las necesidades ajenas

Persistencia, porque seguir intentándolo a pesar de los obstáculos que se presenten es esencial para el éxito de un negocio. La persistencia está unida a la acción porque es la que nos permite continuar avanzando en vez de retirarnos.

¿Te consideras una persona exitosa?