OCU considera "insuficiente" el compromiso para reducir el azúcar y las grasas

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha querido entrar a valorar el acuerdo alcanzado este martes entre el Ministerio de Sanidad y casi 400 empresas de la industria alimentaria para reducir el azúcar, las grasas saturadas y sal en sus productos procesados.

Aunque la organización de consumidores cree que la medida es positiva, valora que es insuficiente ya que no consigue el cambio radical y definitivo que OCU pedía para hacer más saludables los alimentos procesados. En este sentido, lamenta que la reducción del 10% acordada con la industria no se aplique a todos los productos, sino solo a algunos.

La asociación de consumidores cree necesario seguir disminuyendo el contenido de azúcares, grasas saturadas y sal de forma gradual y espera que la reducción de azúcar no signifique "sustituirla por edulcorantes", según advierten en un comunicado emitido este miércoles.

OCU denuncia que en cuanto al azúcar, por ejemplo, se establece una reducción del 10% en yogures o leches fermentadas, azucaradas, con sabores o frutas, pero esta reducción solo alcanza el 3.5% en un flan de huevo o un 6% en unas natillas. Algo similar pasa con los productos de bollería, galletas, helados infantiles a base de agua o salsa kétchup, en los que la reducción se queda solo en el 5%, todos ellos alimentos con una gran cantidad de azúcar y cuya reformulación debería haber sido, según la organización, al menos también de ese 10%.

Para las bebidas refrescantes, añaden, el acuerdo solo contempla la reducción del 10% en bebidas de lima limón, sin extender la reformulación al resto de productos. Y en los cereales de desayuno, por su parte, solo se contempla la reducción del 10% en cereales de desayuno infantil con chocolate, sin extenderlo al resto de gama.

Algo similar ocurre en cuanto al contenido en sal, donde OCU destaca que en los aperitivos salados o la salsa de tomate kétchup, se reduce un 5 % de sal y las cremas de verduras un 6,7%. Lo mismo ocurre en la reducción de grasas saturadas, donde la medida se reduce solo al 5% en las galletas, las rosquillas, o los bollos con pepitas de chocolate, entre otros.