Los cárnicos representaron el 17,5% del gasto en alimentación en 2014
El consumo de pollo bajó el 5,4% debido al aumento de su precio.
Los productos cárnicos continúan siendo la primera partida del gasto en la cesta de la compra de los españoles, con una cuota en valor del 17,5% en 2014, según los últimos estudios de la consultora Nielsen que ha presentado estos datos en el XV Congreso AECOC de Productos Cárnicos que se celebra en Lleida.
Por tipologías, la bajada del 2,5% en el importe de la carne de cerdo supuso un aumento en sus compras del 0,8%. Por el contrario, el pollo se encareció el 2% y sus compras cayeron el 5,4%. De este modo, tras seis años de crecimiento, el pollo perdió un punto de cuota en 2014 a favor de la carne de cerdo.
Roberto Butragueño, experto de Servicios a la Distribución de Nielsen, ha afirmado que esta tendencia pone de manifiesto que los españoles están recuperando “parte de su confianza” a la hora de consumir ya que “no compran tanto el producto más barato, sino el de mejor relación calidad/precio”.
No obstante, el producto cárnico más caro por excelencia, el vacuno, ha vuelto a perder presencia en la cesta de la compra (-3,9%) debido al incremento medio del 2,4% en su importe final.
Por otra parte, Nielsen muestra que la charcutería se erige en uno de los nichos de mercado de mayor crecimiento en el mercado de gran consumo. Los españoles aumentaron las compras de estos productos el 0,7% en 2014 a pesar de que se encarecieron el 0,9%.
Butragueño ha explicado que esto es debido principalmente a cuatro motivos: el desarrollo de productos innovadores, el fuerte componente salud de alguno de sus productos como el pavo, el desarrollo de nuevos formatos económicos como los loncheados a un euro y el abaratamiento de algunas categorías a priori más caras que, por ende, son más asequibles para las familias.
Así, productos como el fuet (6,3%), el fiambre de pavo y pollo (3,7%) y el jamón curado (1,7%) ganaron en presencia en la cesta de la compra, en detrimento de clásicos como el el jamón de York (-0,6%), el chorizo (-1,6%) y el salchichón y el salami (-2,8%).
Por último, Butragueño ha destacado que “la carne fresca acumula dos años en negativo, tras caer el 1,4% en 2014, debido al alza de los precios por encima del 1%. Por su parte, la charcutería mejoró su crecimiento hasta el 1,6%.”
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