El Gremio de Restauración de Barcelona ha denunciado este martes que los quioscos que venden café y comida envasada incurren en "competencia desleal e intrusismo" y han anunciado que se movilizarán para evitar que esta actividad sea regularizada.

Según los restauradores, los quioscos de prensa que ofrecen bebidas y comida están ejerciendo como bar "con ventajas competitivas", ya que pagan un canon que oscila entre los 150 y los 800 euros al mes, una cantidad muy por debajo de lo que cuesta mantener un local de restauración.

El coste para los quioscos es, a su juicio, "manifiestamente más bajo que el alquiler de un local de restauración a pie de calle", una cantidad a la que se tendría que sumar otros gastos como "los suministros, el personal o la amortización de las inversiones".

El Ayuntamiento de Barcelona ha modificado el pliego que regula la concesión de los quioscos para introducir cambios para ayudar a la viabilidad de estos negocios y que fueron consensuados con el sector el pasado verano.

El Gremio se muestra comprensivo con la intención de rescatar a los quioscos de la ciudad, pero rechaza que se les permita vender café y comidas.