El consumo de espirituosos creció el 2% en 2017

Cifras positivas son las que ha alcanzado el sector de las bebidas espirituosas en 2017, con unas ventas que se elevaron el 2%, hasta los 218 millones de litros, impulsadas por el turismo y las exportaciones, según datos de la Federación Española de Bebidas Espirituosas (Febe).

Sin embargo, y a pesar de registrar tres años consecutivos al alza, el sector está muy lejos aún de situarse en los valores que presentaba antes de la crisis, precisa esta entidad.

"Si estas cifras han sido posibles, sobre todo después de la subida del 5% de los impuestos especiales que gravan nuestros productos en diciembre de 2016 y en un entorno sociopolítico inestable, ha sido sobre todo gracias a la afluencia de turistas a nuestro país y al buen comportamiento de nuestras exportaciones", ha subrayado el director de Febe, Bosco Torremocha.

EXPORTACIONES AL ALZA

Así, las exportaciones de bebidas destiladas crecieron el 5% el año pasado, muy por encima de la media europea. El 40% de la producción nacional se destina a la exportación, a destinos prioritarios como Filipinas (72 millones de euros), Alemania (48 millones de euros), México (42 millones de euros) y Francia (31 millones de euros).

Torremocha ha hecho hincapié en la necesidad de generar "confianza" en el consumidor propiciando un marco social y económico estable, ya que, en su opinión, solo garantizando este escenario, la industria podrá mantener una inversión estable que genere empleo y riqueza social.

El sector de bebidas destiladas representa ya un valor económico de 7.585 millones de euros, lo que supone el 0,17% del PIB. España, con 3.800 centros de producción distribuidos por la geografía nacional, de los que el 80% son pymes y empresas familiares, es el tercer país europeo con mayor número de Indicaciones Geográficas Protegidas de bebidas espirituosas (19), solo por detrás de Francia y Alemania.

IMPUESTOS Y EMPLEO

Otros datos facilitados por Febe indican que el 73% de la recaudación correspondiente a impuestos especiales aplicables a las bebidas con contenido alcohólico recae exclusivamente sobre los destilados, pese a representar solo el 3,6% del volumen de consumo total de bebidas alcohólicas.

Respecto al empleo que el sector genera en España, Torremocha señala que "por cada empleo directo generado en por el sector, se crean otros nueve puestos de trabajo indirectos e inducidos en otros sectores".

Por otra parte, en España se consumen unos 6,2 litros de alcohol puro per cápita, por debajo de la media europea, que se sitúa en 9,2 litros por persona y año. Por categorías, España sigue siendo un país eminentemente consumidor de whisky, con el 25% de la cuota de mercado, seguido del segmento de licores, que ya representa una cuota del 20%. El buen comportamiento del gin ha contribuido a mantener la senda de crecimiento que experimenta esta categoría en los últimos años, representando ya el 19% del total.

En el cuarto lugar aparece el ron, con el 15% de la cuota de mercado, por delante del brandy, con un 10%. El anís representa el 6%, mientras que el vodka se sitúa en el 4% y el tequila en el 1%. La hostelería sigue siendo el principal canal de ventas del sector. Supuso el 62% del total en 2017, mientras que el 38% restante correspondió al canal de la distribución.