Reckitt, la dueña de Vanish y Durex, ha cerrado el ejercicio 2024 con una facturación neta de 14.169 millones de libras, lo que constituye un retroceso del 3% respecto al pasado año.
En el conjunto del año, el beneficio operativo de Reckitt creció el 3% hasta las 3.480 millones de libras.
En el último trimestre, las ventas de la multinacional británica crecieron el 4,6% a superficie comparable, por debajo de las estimaciones del mercado, que apuntaban al 5,3%.
Entre las principales preocupaciones para la compañía se encuentra la mala evolución de los volúmenes. Entre las principales preocupaciones para la compañía se encuentra la mala evolución de los volúmenes, que caen el 3,3% en Norteamérica y el 0,4% en Europa. Los mercados emergentes, y en particular China, India y Brasil, maquillan el resultado final.
Su división de Higiene, la más importante en términos de ventas (6.150 millones de libras, más del 40% del total) gracias a marcas como Vanish y Finish, creció un 1,8% en volumen.
En cambio, Salud (-0,2%), a la que pertenecen Durex; y Nutrición (-7,1%), que engloba diferentes marcas de alimentación dietética y leche de fórmula, caen en volumen. Estas dos divisiones representan más del 55% de las ventas del grupo.
Reckitt ha achacado los malos resultados de su división de Salud a la escasa incidencia del frío en la temporada invernal, lo que se ha traducido en menores ventas de sus productos para el resfriado.
La multinacional se encuentra inmersa en un amplio proceso de reestructuración, parte del cual es la venta de su negocio de Cuidado del hogar, valorado en 6.000 millones de libras, que incluye los ambientadores Air Wick y Cillit Bang.
El pasado junio de 2024, el consejero delegado, Kris Licht, ya advirtió que pondría en venta las divisiones de menor crecimiento para concentrarse en las marcas más potentes. Entre ellas, Vanish, Durex, Dettol, Harpic y Strepsils.