Recién celebrada la Super Bowl, el espectáculo deportivo y televisivo más seguido de Estados Unidos y cada vez con más adeptos en el resto del mundo, toca hacer balance del show publicitario que se emite durante la final y por el que las marcas pagan millones y millones de dólares por aparecer apenas 30 segundos en televisión.

Uno de los spots que más interés y comentarios ha despertado ha sido, una vez más, el de Coca-Cola, que esta vez ha apostado por enfrentar a dos superhéroes como Hulk y Ant-Man.

La bestia verde y el héroe diminuto se enfrentan por una lata del popular refresco y durante su competición destruyen todo el mobiliario urbano que se ponga delante de ellos.

La secuencia reúne acción, humor y unos efectos especiales que ya les gustaría a multitud de películas.