Los ganaderos denuncian a Alimerka por vender leche a "precios ruinosos"

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha denunciado a la cadena de supermercados asturiana Alimerka por estar vendiendo su leche de marca blanca por debajo de los costes de producción. Esta entidad exige a la enseña que rectifique y cumpla la Ley de la Cadena Alimentaria.

En este contexto, UPA recuerda que nos encontramos en un contexto de "subida sin precedentes de los costes de producción, que afecta de forma especial al sector vacuno" y denuncia que sigue habiendo cadenas de la gran distribución "que usan la leche como producto reclamo, realizando ofertas abusivas y vendiendo a pérdidas".

En el caso de la citada cadena, la organización asegura que en sus lineales se puede encontrar estos días leche de sus marcas de distribuidor Alimerka y Cremosita a 0,70 euros, una cifra que califica de "abusiva y ruinosa".

INCLUMPLIMIENTO DE LA LEY

Desde la Unión argumentan que, con los actuales costes de producción, disparados por la espiral alcista que afecta sobre todo a los costes energéticos, no es posible vender leche a ese precio sin incurrir en incumplimientos de la Ley.

La norma a la que hacen referencia es la Ley de la Cadena Alimentaria, que ha sido revisada y endurecida recientemente, precisamente para evitar la "destrucción de valor en la cadena alimentaria", como especifica la norma. UPA cree que ofertar leche a ese precio es "una destrucción manifiesta del valor del trabajo de toda la cadena láctea", y en especial del primer eslabón: los ganaderos.

Por ello, la organización ha pedido a la empresa Alimerka, "que suele presumir de origen rural y asturiano, y se vanagloria de apostar por la sostenibilidad y el precio justo", como recoge en su web, que "se aplique el cuento" y asuma su responsabilidad con el sector primario. "Los alimentos deben venderse a un precio justo", sentencian desde UPA. "Vender el litro de leche a 0,70 es venderlo prácticamente más barato que el agua. Es ilógico e ilegal", han concluido.

Los ganaderos han puesto estos hechos en conocimiento de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), a la que han pedido que actúe con celeridad para frenar estas "prácticas abusivas que perjudican gravemente a los ganaderos".