Pascual redujo sus pérdidas a 2,6 millones en 2021 y elevó su facturación

Calidad Pascual registró una pérdida consolidada de 2,6 millones de euros en el ejercicio 2021, el 80% menos sobre los números rojos del ejercicio anterior, según consta en las cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil que recoge Cinco Días.

La compañía alcanzó una facturación que creció casi el 7%, hasta los 660 millones, cifra el 5,4% inferior a la de 2019. Estos resultados, según indica la empresa, se deben a "la recuperación tras la situación de pandemia acaecida a nivel mundial", lo que le permitió, por ejemplo, recuperar parte de su negocio en hostelería, que "vio crecer su actividad frente a 2020, si bien aún lejos de los años 2019 y 2018", indica el citado informe.

Por segmentos de actividad, la categoría de productos lácteos creció el 5,5% hasta 410 millones. La de Bifrutas y zumos mejoró el 6,8%, y la de agua, que desarrolla a través de la marca Bezoya, facturó 143 millones, el 5% más. La categoría de ovoproducto mejoró el 28,7% anual hasta 46,2 millones.

UN EBITDA POSITIVO

Asimismo, Calidad Pascual generó un resultado de explotación positivo, de 4,1 millones de euros, aunque éste quedó neutralizado por unos gastos financieros de 4,6 millones, que pese a ser el 38% inferiores a los de 2020, arrastraron el resultado final del ejercicio a cifras negativas.

La compañía alude igualmente a la situación geopolítica en Rusia y Ucrania que está arrastrando incrementos en los precios de la materia prima y la energía, "existiendo incertidumbre sobre los posibles problemas en la cadena de suministro".