El Principado de Asturias trabaja para convertirse en la primera comunidad autónoma de España que regule la venta y el consumo de las bebidas energéticas a través de una ley específica. Con su entrada en vigor, los menores de 16 años no podrán tener acceso a estos productos de forma directa o indirecta, ya que el suministro de este tipo de bebidas por parte de los padres, por ejemplo, también podría ser objeto de sanción, informa El País.
Se espera que esta Ley de Bebidas Energéticas, que cuenta con el respaldo de todos los actores implicados en el proceso de venta, distribución y consumo, esté lista el próximo verano para su revisión y su posterior paso por la Junta General del Principado, pero no será hasta el 2026 cuando entre en vigor.
Por su parte, Galicia también tramita una prohibición de estos productos para los menores a través de una norma no específica (Ley de Protección de la Salud de las Personas Menores) y el Ministerio de Consumo ha anunciado que los prohibirá en colegios e institutos.
Los espacios en los que se venden este tipo de productos son muchos, desde las tiendas de barrio a los grandes almacenes, pasando por la hostelería e incluso las máquinas expendedoras. Y entre sus efectos secundarios figuran las naúseas, palpitaciones, insomnio o micción constante ya que son en realidad productos sin alcohol pero con un alto contenido de sustancias excitantes, principalmente cafeína, aminoácidos como la taurina y azúcares, que prometen al consumidor eliminar la fatiga y el agotamiento y aumentar la habilidad mental y la resistencia física, aunque en realidad solamente inhiben temporalmente esas sensaciones.
Una competencia que escapa al Gobierno del Principado es la regulación de la publicidad en todo tipo de canales. En este sentido, al Ejecutivo autonómico solo le queda instar al Ministerio de Consumo a encabezar una iniciativa para regular qué publicidad, dónde y cuándo puede realizarse respecto a las bebidas energéticas.