El Grupo Central Lechera Asturiana SAT obtuvo el pasado ejercicio un beneficio neto de 26,3 millones de euros, lo que supone casi quince veces más que los 1,8 millones de 2022, según las cuentas anuales de la compañía que ha aprobado este miércoles en asamblea.
Asimismo, la firma, que integra las firmas Capsa, ASA, Aseagro, CLAS Gestión y Biogastur, elevó su facturación el 8,4%, hasta superar los 1.054 millones de euros en un año marcado por una inflación que, según informa la sociedad, "ha traído consigo la valorización del sector lácteo tras diez años de estancamiento de precios".
El alza de precios ha impactado así "positivamente en todos los eslabones que forman parte de la cadena de valor del grupo de empresas y en su resultado".
La cifra de negocio por venta de leche de la sociedad matriz se situó en los 238,4 millones de euros, un 22,46% más, y el precio pagado a los ganaderos se situó un 6,59 por ciento por encima del premio medio de España, con lo que se mantuvo como la empresa láctea que mejor remunera a sus socios ganaderos: 6.594 al cierre del ejercicio, de los que 825 eran abastecedores.
El beneficio por venta de leche se situó en la sociedad matriz en los 4,42 millones de euros, frente a los 3,23 millones alcanzados en 2022.
CAPSA FOOD
Respecto a Capsa Food, que engloba tanto a Central Lechera Asturiana como a Larsa, ATO, Vega de Oro, Lácteas Flor de Burgos e Innova Food Ingredientes, la facturación alcanzó los 968,5 millones de euros, el 8% más.
Central Lechera Asturiana se posicionó un año más como la tercera marca española más elegida y la primera en Asturias, mientras que LARSA lideró un año más este ranking en Galicia.
La facturación de ASA (Asturiana de Servicios Agropecuarios) en 2023 superó los 80 millones de euros, el 8% por encima del año anterior, mientras que Biogastur, proyecto de economía circular del grupo, procesó el 72,3% de los residuos de las fábricas junto a purines tratados, que se valorizaron para obtener energía renovable a través del biogas, biofertizantes y compost.
